Si no fuera porque hice colocado el camino de tu espera me habría desconectado;
condenado a mirarte desde fuera y dejar que te tocara el sol.
Y si fuera mi vida una escalera me la he pasado entera buscando el siguiente escalón,
convencido que estás en el tejado esperando a ver si llego yo.
Y dejar de lado la vereda de la puerta de atrás por donde te vi marchar
como una regadera que la hierba hace que vuelva a brotar y ahora es todo campo ya.
Sus soldados son flores de madera y mi ejército no tiene bandera, es sólo un corazón
condenado a vivir entre maleza sembrando flores de algodón.
Si me espera la muerte traicionera y antes de repartirme del todo, me veo en un cajón..
Y dejar de lado la vereda de la puerta de atra´ssssss
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